Punto de retiro

Meditas en todo lo que te pasa,

 En cada problema, dolor, decepción, enamoramiento,

Y muchas cosas más que la vida nos pueda brindar

Pero en cada una de esas fases, etapas, o simplemente circunstancias

Te das cuenta que llega el maravilloso y extraordinario

 “Punto de retiro”

Ningún problema dura toda la vida,

Ningún dolor duele más de lo que debería,

Y Ningún amor rompe tu corazón más de lo que se pueda romper

La vida está llena de esos momentos en lo que decides retirarte,

En los que sabes que es mejor huir que quedarse allí.

Nuestra vida se asemeja a un juego de póker,

Unos lo apuestan todo, entregándose perdidamente a las personas equivocadas,  empujando sus límites hasta ya no poder,

Otros se retiran antes de perderlo todo,

Antes de enamorarse,

Antes de que no encuentren salida,

Y Otros prefieren no apostar

 y retirarse antes de que el juego comience.

Creería que lo más sabio es la última opción

 ya que sería aceptar que no sabes cómo jugar 

y necesitas a alguien que te guié.

Pero el ser humano es tan curioso que siempre piensa en

“el que pasaría si”

Somos codiciosos, buscamos empujar nuestra mente, más de lo que debemos.

Siempre pensamos tener un as bajo la manga

Pero lo que no sabemos es que la manga siempre se rompe y el as desaparece.

Cuando nos encontramos en esas circunstancias en las que ya no tenemos ni la menor idea de que hacer es ahí cuando obtienes:

Los “puntos de retiros”

Estos llegan cuando reconoces que ya es hora de  dejar de llorar,

De Pensar,

Y de dejarse de lamentarse

Llegan al aceptar que una relación ya no da para más y decides retirarte

Llega cuando te besas apasionadamente y sabes que si no paras provocaras algo de lo que te podrías arrepentir de por vida.

Llega cuando aceptas que la carrera que escogiste no es la que querías realmente así que empiezas una nueva,

Llega cuando aceptas que el chico del que te enamoraste te lastimo pero decides dejarlo ir.

Es en ese preciso momento en el que te retiras

Con la cabeza en alto sabiendo

Que de la vida todo se aprende

Que arriba hay un Dios y si dejáramos que él juegue con nosotros al póker

Probablemente ganaríamos más y perderíamos menos.

Tal vez no se pueda retroceder

Ni cambiar el pasado

Pero estoy muy segura

Que jamás volverás a jugar al póker de la misma manera que lo hiciste,

Sin antes aprenderte las reglas del juego

Y dejar al experto que juegue por ello.